INFECCIÓN DE VÍAS URINARIAS

Es una invasión microbiana del trayecto de la vía urinaria, regularmente provocado por bacterias. Se le denomina Pielonefritis (si afecta al riñón), cistitis (si afecta a la vejiga), uretritis (si afecta a la uretra) y prostatitis (si afecta a la próstata).

Es el segundo tipo de infección más común en el mundo, y se presenta con mayor frecuencia en la mujer (a cualquier edad), esto debido a las características anatómicas (cercanía de la uretra con el ano y la vagina), aunque es más frecuente en aquellas que han iniciado su vida sexual o cursan con embarazo.

En los varones predomina en la infancia y después de los 50 años, sobre todo si presentan problemas urológicos.

Existen diversas causas, entre las principales: Infecciones urinarias anteriores, actividad sexual o múltiples parejas sexuales, cambios en la flora vaginal (secundaria a uso de espermicidas, anticonceptivos como el DIU, la menopausia), el embarazo, higiene inadecuada, escasa ingesta de líquidos, alteraciones en la estructura de la vía urinaria (quistes renales, Insuficiencia renal, Litiasis renal, Incontinencia urinaria, crecimiento prostático, alteraciones en la función de la vejiga), uso de sonda urinaria, Enfermedades que inmunodeprimen (Diabetes Mellitus, VIH, Cáncer).

Los síntomas que ocasiona, regularmente son dolor o ardor al orinar, orina muy frecuente, orina con mal olor o muy concentrada, deseos intensos de continuar orinando aún después de haber terminado, sangre en orina, dolor en región pélvica. Fiebre, escalofríos, dolor en región lumbar en uno o ambos lados, nauseas, vómitos.

El diagnóstico debe realizarse SIEMPRE por valoración médica, este se hará mediante un interrogatorio específico orientado a la sintomatología, los hábitos higienicodieteticos y antecedentes de importancia. Una exploración física minuciosa. Análisis clínicos de orina e incluso sanguíneos y ocasionalmente ecográficos.

IMPORTANTE…

Acudir a valoración médica si presenta sintomatología sospechosa, ayuda a su Médico a:

  1. Diagnóstico oportuno y tratamiento correcto.
  2. Prevenir complicaciones como: Recurrencia de la infección, re infección (infecciones por otros micro organismos), mayor invasión de la vía urinaria, necesidad de manejo hospitalario por bacteriemias (invasión sanguínea por la infección), Sepsis, Falla orgánica múltiple, formación de abscesos renales, resistencias antibióticas, descompensación de enfermedades crónicas o inmunes, muerte.
  3. Detectar la causa de las infecciones, sobre todo, cuanto existe recurrencia (malformaciones anatómicas, microorganismos resistentes o poco frecuentes).
  4. Diferenciar el diagnóstico de otros padecimientos que pueden presentar sintomatología similar y requieren manejo distinto (Apendicitis, Quistes ováricos, Litiasis renal).

HIDROCELE

Es la acumulación excesiva y anormal de líquido en la túnica vaginal (capa que rodea el testículo) dentro del escroto.

Puede afectar a uno o ambos testículos, siendo progresivo y llegando a contener de 100-300ml, llegando hasta 1 litro de líquido.

Es la principal causa de inflamación y dolor en el testículo. De acuerdo a su momento de presentación, puede ser:

  • Congénito (Se tiende desde el nacimiento): Afecta principalmente a bebés prematuros, hijos de madres con Diabetes gestacional. Niños con hernias inguinales, otro tipo de enfermedades severas (Linfedema, Apendicitis, Ectopia testicular, Hidronefrosis).
  • Adquirido: Mas frecuente entre los 1-15 años y <40 años regularmente es ocasionado por torsión testicular, traumas, antecedente de hidrocele al nacer y tumoraciones, Infecciones y Hernias inguinales.

Los síntomas que pueden presentarse son: aumento de tamaño del escroto afectado al esfuerzo, disminuyendo con el reposo, aumento de volumen progresivo, dolor, enrojecimiento, sensación de pesadez.

Su diagnóstico es por valoración médica mediante: Interrogatorio minucioso de características clínicas y antecedentes relevantes, exploración física y con procedimientos durante su consulta, apoyo con estudios paraclínicos (ecografía y Tomografía en algunos casos, dependiendo la sospecha de la causa).

El tratamiento, dependiendo el grado de lesión y sospecha de la causa, ocasionalmente es vigilancia, teniendo como preferencia la Hidrocelectomía.

IMPORTANTE:

Un aumento de volumen escrotal debe ser vigilado y atendido de forma inmediata, buscando su resolución oportuna ya que en este caso, el aumento de líquido constante puede provocar complicaciones como alteraciones del flujo sanguíneo que nutre al testículo llevándolo al infarto, alteraciones de la estructura como atrofia testicular (disminución del tamaño del testículo), alteraciones de la fertilidad, necesidad de retirar es testículo afectado.

La Hidrocelectomía permite evitar la sintomatología, disminuir el riesgo de nuevos cuadros, el riesgo de presentar herniaciones asociadas, liberar la presión a la que se somete el tejido testicular, disminuir el riesgo de infertilidad, el riesgo de pérdida testicular, identificar la causa, sobre todo si es asociada a tumoraciones.

EL HIDROCELE PUEDE SER LA ÚNICA O LA PRIMERA MANIFESTACIÓN CLÍNICA DE UNA TUMORACIÓN TESTICULAR TANTO DE ORIGEN BENIGNO, COMO MALIGNO.

BALANITIS

Es la inflamación del glande (cabeza del pene), y puede presentarse sola o acompañada de postitis (inflamación del prepucio).

Puede presentarse en cualquier etapa de la vida, con predominio en etapa preescolar y en pacientes que tiene factores de riesgo como Diabetes Mellitus, pacientes inmunodeprimidos, Fimosis (prepucio apretado, que no puede retraerse). Y de acuerdo a su presentación, puede ser:

  • Agudo: De aparición brusca. 
  • Crónico: Qué tiene una duración de varias semanas. 
  • Recurrente: Presenta mejoría y posteriormente reaparece, así en varias ocasiones. 

Regularmente es ocasionado por mala higiene, irritación o traumatismo (primera relación sexual, uso de lubricantes, uso de preservativo, laceraciones), enfermedades de la piel (Dermatitis de contacto, erupciones medicamentosas, Liquen plano, Liquen simple crónico, Psoarisis, Dermatitis Seborreica, Lesiones ulcerativas por Artritis reactiva).

Las manifestaciones clínicas principales son dolor, irritación, secreción, fimosis, ulceraciones, adenopatías, inflamación, comezón, enrojecimiento con trasudado en la cabeza del pene y/o ardor al orinar.

Su diagnóstico es exclusivamente por valoración médica, mediante interrogatorio orientado a sintomatología, posibles factores de riesgo y antecedentes importantes. Exploración de las manifestaciones clínicas y apoyo con estudios paraclínicos como cultivos de secreción del pene, estudios sanguíneos de glucosa y orientados a la posible causa.

El tratamiento en el caso de los cuadros agudos se basa principalmente en los cambios higiénicos y con apoyo de medicamentos (si la causa lo permite). En los casos crónicos y recurrentes el tratamiento ideal es la circuncisión.

IMPORTANTE:

La Circuncisión como tratamiento de la Balanitis y Balanopostitis debe considerarse como preferente en los casos crónicos y recurrentes, ya que favorece la disminución de cuadros infecciosos e inflamatorios y con ello el cambio en las características del tejido que pueden generar consecuencias graves como:

  1. Balanitis xerótica obliterante o Liquen escleroatrofico: Que consiste en una zona indurada cerca de la punta del glande que puede comprometer el meato uretral (sitio por donde sale la orina), generando el cierre del mismo. Situación en la cual la vigilancia debe ser constante por el resto de la vida del paciente.
  2. Parafimosis: Dificultad para retraer el prepucio completamente.
  3. Fimosis: Dificultad para iniciar la retracción del prepucio.
  4. Tumoraciones: En un porcentaje importante, la balanitis o balanopostitis puede ser la primera manifestación o ser antecedente de la aparición de tumoraciones cancerígenas.

LITIASIS RENAL

Es la formación de cálculos o piedras por concentración de sales en el riñón.

Es mas frecuente en hombres, entre los 20 y 50 años de edad, se forman principalmente de calcio, ácido úrico, estruvita (mujeres) y cistina. 50% de los pacientes que lo presentan una ocasión, vuelven a presentarlo. Se asocia con sedentarismo, ingesta abundante de sal, proteínas, grasas, azúcares y purinas, sobrepeso, obesidad, pérdida brusca de peso, personas que viven en zonas muy calurosas.

Puede verse asociada con algunas enfermedades como Hiperoaratiroidismio, Cistinuria, acidosis tubular renal, Sarcoidosis, Trastornos mieloproliferativos, Enfermedad de Cron, abuso de laxantes, Infecciones recurrentes, Alteraciones genéticas, Trastornos de ácido úrico. Tratamientos con Quimioterapias, Diarreas constantes, Síndrome metabólico, Síndromes paraneoplasicos, Síndrome de mala absorción intestinal.

Puede cursar asintomática, o presentar síntomas como dolor lumbar tipo cólico de intensidad variable, irritación al orinar, dolor al orinar, deseo de continuar orinando, urgencia para orinar, pus en la orina, además puede cursar con otros síntomas como náuseas, vómito, distensión abdominal, sudoración intensa y estreñimiento.

El diagnóstico se logra mediante un interrogatorio de antecedentes de importancia y manifestaciones clínicas, exploración física y una serie de estudios como valoración del sedimento urinario, estudios de sangre (nos ayudan a detectar posibles causas, así como a valorar la función del riñón), estudios de imagen como ecografía y Tomografía.

El tratamiento es inicialmente basado en mejorar la sintomatología mediante el uso de fármacos y la modificación de los hábitos higienicodietéticos, posteriormente encaminado a manejar las causas y de acuerdo a las características de los litos, puede requerir manejo quirúrgico, que consiste en eliminarlos, sobre todo en casos donde la sintomatología persiste, no hay mejoría de los cuadros infecciosos, existen litos múltiples, se detecta que son secundarios a baterías o presentan dimensiones de más de 10mm.

Existen diversos tipos de cirugías como:

  1. Nefrolitotomía percutánea: Se introduce el equipo a través de la piel en un costado o en abdomen, se utiliza cuando hay litos mayores a 2cm y de mayor consistencia.
  2. Litotricia extracorpórea por ondas de choque: Se transmiten ondas de choque en el cuerpo del paciente. Es un procedimiento no doloroso, ambulatorio, con pocos riesgos de complicación. Se utiliza cuando hay litros de 10-20 cm, o alteraciones en la anatomía que no permiten que se utilice otra técnica.
  3. Ureterorrenoscopia flexible: Se utiliza cuando existe una anatomía alterada, en pacientes con litos de 10-20mm.
  4. Cirugía abierta: Se utiliza en casos donde otras técnicas han fallado, existen deformidades importantes y se utiliza también para retirar partes del riñón o el riñón completo, cuando ya no son funcionales.

IMPORTANTE:

Es importante acudir a valoración y manejo medico oportuno, ya que existen diversas situaciones que pueden provocar la complicación de la enfermedad, como la presencia de bacterias que mientas no se eliminan del tracto urinario favorecen la formación de litos o piedras y generan crecimiento y ramificación rápida de los mismos, generando obstrucción total e incluso Insuficiencia renal aguda o crónica, secundaria a la lesión del tejido por la obstrucción constante. Otras complicaciones posibles es la Pielonefritis Xantogranulomatosa y con estos cambios estructurales Carcinoma epidermoide.

LITIASIS URETERAL

Es el paso por el uréter de un cálculo o piedra (formado por acumulo de sales en el riñón), que puede generar o no que se obstruya. Principalmente se encuentran formados de calcio y ácido úrico y predomina su aparición en hombres entre los 20 y 50 años.

Es el sitio más frecuente de localización de los litos, ya que pueden detenerse a lo largo de su trayecto en alguno de los estrechos anatómicos del mismo, localizándose en la unión de la pelvis renal con el uréter, en su porción inferior o en el meato ureteral.

Es común que se encuentren en dimensiones menores a 5mm, pudiendo eliminarse espontáneamente. Con dimensiones mayores se aumentan las posibilidades de obstrucción y con ello complicaciones.

Sus manifestaciones clínicas principales son dolor intenso en región lumbar, que se recorre a un costado, la ingle y genitales del lado afectado, puede acompañarse de otra sintomatología como náuseas, vómito, taquicardia, inflamación abdominal, aumento del movimiento intestinal, sangrado en orina.

Su diagnóstico se basa en las manifestaciones clínicas, la exploración física, y mediante exploración con diversos estudios paraclínicos, como Ecografía, Urotac, Urografía excretora; además de otros estudios complementarios como análisis de orina y de sangre.

Algunas ocasiones cursan sin manifestaciones clínicas y se encuentran como hallazgos al realizar diversos estudios ante otras sospechas diagnósticas.

El tratamiento radica en mejorar la sintomatología, evitar la obstrucción y en caso de presentarse, retirarla para prevenir complicaciones. Ocasionalmente es posible eliminarlos con ayuda de medicamentos, procesos que deben ser vigilados estrechamente por un especialista, sin embargo cuando existen datos obstructivos, el manejo ideal debe ser quirúrgico, teniendo como ventajas gran efectividad para fragmentar la mayoría de los litos sin importar su composición a cualquier altura, mayor control del cirujano durante el tratamiento, es un procedimiento relativamente rápido, de corta estancia intrahospitalaria, permite valorar las condiciones del tejido urinario, pronta recuperación, retiro de fragmentos con ayuda del instrumental y con ello disminuir la sintomatología.

Los procedimientos quirúrgicos que pueden realizarse son:

  1. Litotricia extracorpórea por ondas de choque: Se transmiten ondas de choque en el cuerpo del paciente. Es un procedimiento no doloroso, ambulatorio, con pocos riesgos de complicación. Se utiliza cuando hay litros de 10-20 cm, o alteraciones en la anatomía que no permiten que se utilice otra técnica.
  2. Ureterorrenoscopia flexible: Se utiliza cuando existe una anatomía alterada, en pacientes con litos de 10-20mm. 
  3. Ureteroscopia semirrígida y flexible con litotricia endoscópica en sus variantes electrohidráulica, ultrasónica, pneumática y con láser: Es de gran utilidad ante litos menores a 15mm de diámetro, el tipo de procedimiento tendrá variación de acuerdo a las características y lugar donde se encuentre dicho cálculo.
  4. Ureterolitotomia lumbo-laparoscopica: Se indica ante Litiasis enclavadas de más de 1.5cm, donde otras técnicas han fallado, o existen alteraciones anatómicas.
  5. Ureterolitotomia laparoscópica: Situaciones complejas, donde todas las técnicas menos invasivas han fracasado.
  6. Ureterolitotomía abierta.

IMPORTANTE: 

La litiasis ureteral obstructiva, que no se trata de manera oportuna, puede presentar complicaciones severas en un lapso corto de tiempo, sobre todo si es bilateral, puede generar Hidronefrosis severa, Formación de absceso renal, Infecciones severas o recurrentes, Sepsis, Choque séptico y Necesidad de Nefrectomía.

LITIASIS VESICAL

Son acumulaciones duras de minerales localizados en la vejiga urinaria. Representan el 1% de las litiasis urinarias, predominan en el hombre en edades avanzadas. Cuando se presentan en niños se asocia a malformaciones congénitas, infecciones y desnutrición.

Pueden ser de dos tipos:

  • Primarios o migratorios, quiere decir que se forman en riñón y descienden hasta vejiga, su crecimiento es lento.
  • Y secundarios o primitivos, son aquellos que se forman en vejiga.

Algunos factores de riesgo para presentarlos son una ingesta abundante de alimentos ricos en proteínas y purinas, Infecciones urinarias recurrentes, estancamiento de la orina en la vejiga, desordenes metabólicos, alteraciones del tejido de la vejiga, objetos extraños en vía urinaria (Sondas), mala función de la vejiga, traumatismos y parasitosis.

Pueden cursar asintomáticos. Pero puede presentar sintomatología como dolor en la parte inferior del abdomen, micción frecuente, interrupción del flujo de la orina, orina turbia o de color oscuro, sensación de pesadez.

Su diagnóstico se realiza mediante la valoración médica, mediante un interrogatorio dirigido a las manifestaciones clínicas y antecedentes de importancia, exploración física y complementaria con algunos estudios paraclínicos como exámenes urinarios, Urocultivos, Ecografías, Tomografías.

Su manejo depende de las características y dimensiones del cálculo, ocasionalmente puede realizarse con el uso de medicamentos, regularmente su manejo el quirúrgico, con el fin de disminuir la sintomatología, y prevenir complicaciones, los principales procedimientos quirúrgicos que pueden realizarse son:

  1. Litotricia extracorpórea: Se indica en litos menores a 3cm.
  2. Cirugía endoscópica: Permite exceresis del cálculo y corrección de los factores obstructivos. En litos de 3-4cm.
  3. Litotricia a través de trocar suprapúbico: En casos de litiasis infantil y litos de más de 3-4 cm.
  4. Cistolitotomía percutánea: En litiasis de dimensiones pequeñas, hasta 1cm de diámetro, pacientes con acceso difícil de la vía uretral.
  5. Cistolitotomía laparoscópica.
  6. Cistolitotomía abierta: En casos donde la litiasis en de gran tamaño y consistencia demasiado dura.

IMPORTANTE:

La litiasis vesical que no es tratada de manera oportuna, se relaciones de manera constante con problemas crónicos de la función de la vejiga, obstrucción del flujo urinario por la uretra y lesión del esfínter renal interno, generando estenosis y destrucción del tejido del mismo.

CÁNCER DE PROSTATA

El cáncer de próstata es el cáncer mas frecuente en el hombre y la segunda causa de muerte por cáncer a nivel global.

Con la edad se incrementa el riesgo de tener cáncer de próstata, el consumo de grasas animales, obesidad, sedentarismo e hipertensión arterial, exposición al cadmio, raza negra y tener antecedentes familiares de cáncer de próstata, son las principales causas.

Existen varios tipos de cáncer de próstata.

A partir de los 40 años los hombres debemos de hacer un chequeo anual con el urólogo, para hacer un check up y hacer un diagnóstico oportuno de cáncer de próstata.

Es necesario ser atendido y analizado por un urólogo y con apoyo de exámenes de sangre como el antígeno prostático específico total y de gabinete (ultrasonido vesicoprostático o ultrasonido transrectal de próstata).

El diagnóstico de confirmación de cáncer de próstata es a través de una biopsia de próstata, de acuerdo al tipo de cáncer de próstata, será el tipo de tratamiento que se le dará a cada paciente.

Las cirugías que ofrecemos son prostatectomía radical abierta, laparoscópica, robótica, hifu y crioterapia, biopsia de próstata.

SANGRADO DE ORINA

El sangrado en la orina se le llama hematuria macroscópica, y el origen del sangrado puede ser originado en cualquier sitio del tracto urinario. Siempre que hay sangrado en la orina (hematuria macroscópica), tenemos la obligación de descartar cáncer de vejiga, cáncer de próstata, cáncer de uretra, cáncer de riñón, cáncer de uréter.

Algunas otras causas : (infecciones de vías urinarias, piedras en la via urinaria, crecimiento de próstata, cistitis, traumatismos, enfermedades en la vejiga, trastornos de coagulación, alteraciones vasculares o tumores benignos y hematuria idiopática benigna.

Tenemos que hacer una historia clínica completa y exploración física completa y apoyarnos siempre de estudios de sangre, ultrasonido vesical y urotomografía con reconstrucción.

El tratamiento será de acuerdo a los antecedentes clínicos, síntomas y hallazgos físicos en cada paciente y protocolo médico estricto para hematuria macroscópica.

CONTACTO

Nuestra dirección

Calle constitucionalistas #9
Colonia 5 de febrero
Municipio Nicolas Romero
CP 54414
Estado de México

Horarios

Lunes – Viernes 09:00AM – 19:00PM
Sábados 09:00AM - 14:00PM

WhatsApp

56 1994 2964

© CENTRO UROLÓGICO NICOLÁS ROMERO
Todos los derechos Reservados

Máximo 1000 caracteres.